sábado, 19 de enero de 2013

Separados


Nos a  tocado vivir momentos muy difíciles. Momentos  de separación. Te toca aprender a vivir lejos de tus seres queridos.
Hacia tiempo que  la  idea le rondaba la cabeza. La sentía crecer lentamente, cada  vez más intensa  y más presente. Durante los últimos  meses  la había ido posponiendo  con falsas  ilusiones,  y también con un punto de remordimiento, como  quien se demora en cumplir un deber ineludible aunque sabe que luego se arrepentirá de ello; hasta que finalmente se ha convertido  en algo concreto,  real. Después  de varios años de precariedad laboral,  y ante la falta de buenas perspectivas, decidió ser otro  delos miles de  españoles que abandonan el país  en  busca de una vida mejor. Mi almohada con orejas a decidido salir para tratar de encontrar  un lugar  mejor para empezar de nuevo. 
Y me doy cuenta de lo inútil y dependiente que soy, lo difícil que es llevar sola una casa, una  peque, un adolescente y un trabajo...  Pero pasa el tiempo  y desarrollas, o mejor dicho, la nueva situación, te obliga a desarrollar capacidades de las que ignorabas totalmente su existencia. Levantarte por las mañanas, preparar el desayuno y, aún con  pijama y despeinada, coger el coche y empezar  con el reparto de niños entre el insti y cole. Yo que, como dice la canción,  ‘antes muerta que sencilla’, nunca  me hubiese atrevido a salir así.
No me gusta dormir sola. Son demasiados los años que no lo hago que he perdido la costumbre y, pese a las protestas del adolescente y la  grata complicidad de la peque, dormimos los tres  juntitos.
Rompemos  las pequeñas reglas, cenamos en la alfombra del salón, frente a  la Tv. Nos quedamos dormidos en el sofá hasta muy tarde...
En mi afán de que no sientan la falta de su padre, saco tiempo  de donde no hay para estar con ellos.
Y cuando, por la calle me encuentro con alguien que tras saludarme me pregunta cómo estoy, no puedo evitar que  mi  voz se quiebre y mis ojos adquieran el tono vidrioso de las lagrimas que asoman y las palabras salen con dificultad, entrecortadas.
Cómo evitar sentir este hueco en el pecho?



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